martes, 2 de septiembre de 2008

La luz, de otra manera (Vicente Gallego)

DOS DE SEPTIEMBRE

Es ahora la vida
esta extraña y frecuente sensación
de sopor y distancia,
y es también una luz que vela el mundo:
salir del caserón tras la comida,
recorrer bajo el sol la carretera
con los ojos ardientes de un verano
y sentarme en la roca frente al mar.
Abandonarme entonces
al sonido sin pausa de la tierra
mientras me vence el sueño algún instante
y me moja las sienes con su agua bendita.
Descubrir con asombro renovado
al pescador que vuelve cada tarde,
como vuelven las olas,
como vendrá la brisa con la noche.
y esperar otra vez sobre la roca,
abrumado en el centro de la vida,
a que la sombra inunde
lentamente mi sombra.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

¿¿¿Pero quieres actualizar de una puñete... vez!!!! Qué me aburro en el curro y no tengo nada nuevo que leer!!!

¡¡besín!!

Anónimo dijo...

Seguimos en plan vago... Va a ser un mes sin escribir, eh?

A.S. Olivier dijo...

ya va !!

Anónimo dijo...

Gracias por este poema de V G en tu espacio que hy descubro.




saludos...

A.S. Olivier dijo...

Gracias a ti Ángel por pasarte por aquí.
Me iré sumergiendo lentamente en tu noctambulario.
Saludos.