lunes, 8 de diciembre de 2008

Mar de fondo

Mañanas como la de hoy, envueltas en este otoño lóbrego y desapacible sólo pueden levantarse de la mano de un buen disco. Hoy Mccoy Tyrner, eterno compañero de Coltrane, deshizo de un plumazo frío y dudas con su impresionante “flying high”. Volé hasta el mediodía creyéndome en uno de esos días soleados de verano donde todo apetece. De camino a Liencres junto a Marta, degustamos lentamente a Aaron, barriendo Molko asfalto y nubarrones a su paso. Me encanta el aspecto desangelado y triste de esta playa con filtro de luz B&W. Escenerio perfecto para un charla distendida y un reencuentro. En Maliaño, mis Arrancacorazones (un estrella en la Guía Michelín de los anfitriones) me esperaban Negroni en mano y compases de Cohen para dar carpetazo a la tarde de lunes. ¿Qué más se puede pedir? Permítanme sugerir un poquito de Sade y su Stronger than Pride para despedirse por hoy ahora que el único abrigo son las vigas de madera de esta buhardilla y esta canción titulada I Never Thought I'd See The Day.
Sencillamente perfecto.

4 comentarios:

Rukaegos dijo...

Qué preciosidad de foto :)

Y el día suena realmente especial. Lo cuentas para darnos envidia, imagino jaja.

Anónimo dijo...

Muchísimas gracias por todo, un beso.

A.S. Olivier dijo...

Rukaegos: Supongo que detrás de cualquier blog se esconden finalidades ocultas de los autores. ¿Te has preguntado si ese día que describo ha existido de verdad?. Recuerda eso que decía Pessoa acerca de que todo poeta es un fingidor..
Pese a todo, estos días han de ser combatidos con firmeza porque créeme pueden llegar a sacar lo peor de nosotros. Así que, o le ponemos ingredientes ricos y compases salados a estas horas en penumbra, o luchamos con impostura frente a ciertas inclemencias atmosféricas. No queda otra. Bueno sí, siempre puedes pegarte tres horas de poda como yo acabo de hacer cuando nuestro oponente da una tregua en forma de tenues rayos de sol. Te mando un fuerte abrazo.
Anónimo: muchas de nadas. Y si eres quien creo que eres, ya sabes, recuerda lo que hemos hablado. No dejes pasar ciertos trenes. BeS.O.Ssosoos

Rukaegos dijo...

Señor Olivier: el poeta es un fingidor y otras cosas. Uno que es un poco como Antoñita la Fantástica tiene muy claro que las realidades leídas, soñadas, deseadas, son también parte de nuestras vidas :)

Así que bueno, si le faltó la realidad física, es un problema menor, jaja: la experiencia la disfrutaste igual escribiéndola.

Que todos en nuestros blogs vivimos a veces un poco de mentirijillas ;)